Tito Lugo

  The privatization of energy services has plunged the country into an unprecedented crisis. Frequent power outages now affect thousands of citizens daily. Despite the investments sought to improve the electrical grid, it only takes a storm or a gust of wind for the system to collapse. These blackouts not only disrupt electricity but also paralyze the distribution of drinking water, severely jeopardizing public health. Both problems are deteriorating the physical and mental well-being of the population, while also driving up operational costs for businesses, which face higher expenses just to stay afloat. Another alarming issue is the deteriorating sewer systems, which are not receiving proper maintenance. This leads to flooding, even with light rainfall, as the drainage system isn’t equipped to handle even an inch of water. To make matters worse, many rural roads are in deplorable condition, eroded to the point that entire communities are cut off, leaving them wit

  La privatización de los servicios energéticos ha sumido al país en una crisis sin precedentes. Los apagones, cada vez más frecuentes, afectan a miles de ciudadanos diariamente. A pesar de las inversiones solicitadas para mejorar la red eléctrica, basta con una tormenta o una ráfaga de viento para que el sistema colapse. Estos cortes no solo interrumpen el suministro de electricidad, sino que también paralizan la distribución de agua potable, comprometiendo gravemente la salud pública. Ambos problemas deterioran tanto la salud física como mental de la población y, además, aumentan los costos operativos de los comerciantes, quienes deben enfrentar mayores gastos para mantener sus negocios en funcionamiento. Otro aspecto alarmante es el deterioro de las alcantarillas, que no reciben el mantenimiento adecuado. Esto causa inundaciones incluso con lluvias ligeras, ya que el sistema de drenaje no está preparado para manejar siquiera una pulgada de agua. A esta problemát