Yanfan (燕芬)
En cantonés, suena como una canción contenida en el nombre de un pájaro. Una melodía leve, imposible de traducir con exactitud, como si cada sílaba viniera acompañada de un recuerdo. “ 燕 ” ( yàn ) significa “ golondrina .” No cualquier ave, sino la que siempre vuelve. La que no se pierde, aunque cruce mares y estaciones. En la tradición china, la golondrina es un presagio de regreso, de lealtad. De hogar. Su vuelo bajo anuncia la lluvia, pero también la cosecha. Llega sin anunciarse y nunca reclama. Vuelve a donde fue amada. “ 芬 ” ( fēn ) es “ fragancia .” No la del lujo ni la ostentación, sino la del arroz recién cocido. Del té de jazmín que inunda una sala sin pedir permiso. De las flores silvestres que perfuman un camino olvidado. Es la fragancia que no se nota al principio, pero que queda adherida al corazón. Yanfan Lee puede leerse, si uno escucha con el alma, como “la señora Lee, fragante como una golondrina.” O de forma más libre: “Ele...