Final y Firme

 

Recientemente, el Tribunal Supremo de Puerto Rico emitió su dictamen sobre la segunda moción de reconsideración relacionada con la colegiación obligatoria. Según mi limitado conocimiento legal, la colegiación compulsoria queda final y firme descartada, dejando a los miembros del Colegio Médico "legalmente descolegiados". La supervivencia de la organización depende ahora de nuestra unión voluntaria como gremio, mediante el sufragio de la cuota anual.

El Colegio Médico ha librado una batalla constante por mejorar el sistema de salud de la isla, actualmente dominado por las aseguradoras. Sin embargo, enfrentarse a los influyentes cabilderos respaldados por grandes sumas de dinero hace que sea difícil favorecer al paciente. Cuando se añade el considerable poder de cabildeo financiero de las aseguradoras en la legislatura, la cuota del colegio parece insuficiente e impotente. Es una batalla histórica, comparable a David y Goliat, donde este último ha hecho trompo Duncan al anterior.

Una de las cuestiones que nunca he logrado entender acerca de nuestros líderes en el colegio médico es la carencia y ausencia de tecnología para la lucha estratégica. Se podría implementar un sistema electrónico para evaluar las capacidades de todos sus miembros, trazar planes de acción, recopilar opiniones del gremio, documentar victorias y derrotas, y construir un ejército de trabajo que pueda realizar cambios sustanciales en las reglas del juego. Inclusive las votaciones pudieran ser electrónicas, pero se empeñan en presenciar llegando cuatro gatos.

Históricamente, los médicos hemos estado limitados por el Estado, las aseguradoras y las instituciones hospitalarias. Somos como peones en un juego de ajedrez, a menudo sin comprender completamente lo que está sucediendo. Aunque salimos de la escuela de medicina o de la residencia con la creencia de que tenemos el control del cuidado del paciente, la realidad es diferente. Nos enfrentamos a terceros con motivos lucrativos que complican nuestra práctica médica. Aunque ellos no estudiaron medicina, son los alfiles que manejan el costo de cuidar los enfermos. Manejan las enfermedades con su sistema de semáforos rojo o verde.

El Colegio Médico no ha reconocido que un sistema de salud universal, como el de países desarrollados de Asia y Europa, elimina el lucro desmedido y proporciona atención uniforme. Nunca han diseñado un estudio de viabilidad de un pagador único, o preguntado a sus constituyentes sobre ideas relacionadas al particular. Mentes capitalistas que creen que el viejo cuco socialista nos va a comer. En lugar de abogar por cambios radicales, prefieren librar pequeñas batallas.

Por ahora, seguiré sufragando la cuota, ya que la ausencia de nuestro gremio disminuye casi a cero las posibilidades de que nos convirtamos en la torre que se mueve vertical y horizontalmente en el cuidado de nuestros pacientes.

*El autor es cirujano pediátrico y catedrático del RCM. Citas (7879 340-1868.