Abuso de Poder en el Sistema Judicial: Un Caso de Injusticia Médica

 


El abuso de poder es un tema crítico que afecta a diversas áreas de la sociedad, incluyendo el sistema judicial. Un ejemplo notorio de esto puede observarse en la experiencia de un cirujano enfrentando una larga y complicada batalla legal tras una operación rutinaria de tiroides realizada en el año 2000.

Este cirujano operó a una paciente con un nódulo tiroideo y niveles elevados de calcio en la sangre. La operación resultó en niveles bajos de calcio, una complicación conocida que ocurre en un pequeño porcentaje de casos y que no se relaciona con la habilidad del cirujano. A pesar de su vasta experiencia y de haber realizado miles de operaciones similares, fue demandado en 2001 por el esposo de la paciente, quien alegaba que esta condición derivó en demencia.

El caso tomó una década en resolverse, pasando por seis jueces antes de llegar a un veredicto en 2011. Durante el juicio, se presentó el testimonio de un otorrinolaringólogo extranjero que afirmó sin evidencia científica que el calcio bajo causó la demencia. En contraste, un endocrinólogo altamente calificado testificó que una baja de calcio puede causar síntomas temporales corregibles con tratamiento adecuado, sin llevar a demencia permanente. Sin embargo, el juez impuso una multa significativa al cirujano, adjudicándole también los costos por la prolongación del caso.

Durante el proceso, se hizo referencia a una demanda anterior que el cirujano había ganado contra una abogada por una reclamación frívola, lo cual generó animosidad en el juicio. Tras esta sentencia, el cirujano enfrentó múltiples rechazos en sus apelaciones a tribunales superiores, incluidos el Tribunal Supremo y la Corte Federal. La ineficiencia y las decisiones erróneas del sistema judicial se evidenciaron en errores básicos de documentación y en la falta de consideración de evidencias científicas.

El impacto de este abuso de poder fue devastador para el cirujano. La situación afectó su salud mental, llevándolo a necesitar tratamiento psiquiátrico. Además, la percepción pública y profesional del cirujano se vio gravemente dañada, a pesar de haber dedicado cuatro décadas a la educación y práctica médica, incluyendo servicio militar en Vietnam.

El cirujano también destacó la inconsistencia y el favoritismo dentro del sistema judicial, mencionando la deferencia selectiva que los jueces otorgaban a ciertos abogados y cómo esto impactó negativamente en su caso. Asimismo, subrayó que, aunque la Junta de Licenciatura y Disciplinas Médicas lo exoneró de cualquier culpa en la operación, los jueces ignoraron esta resolución y continuaron con sanciones injustificadas.

En un contexto más amplio, este caso resalta el peligro del abuso de poder en el sistema judicial. Los jueces que actúan con prevaricación, dictando sentencias a sabiendas de que son injustas, demuestran un desprecio por la justicia y el debido proceso. Este tipo de abuso no solo afecta a las personas involucradas directamente, sino que socava la confianza pública en la equidad del sistema judicial.

La lucha del cirujano por la justicia continúa, buscando que se reconozcan los errores cometidos en su contra y que se rectifiquen las decisiones injustas. Su caso sirve como un recordatorio de la importancia de la integridad en todos los niveles del sistema judicial y de la necesidad de mecanismos efectivos para corregir abusos de poder y garantizar un juicio justo para todos los ciudadanos.

*El autor es cirujano pediátrico y escritor. Tel (787) 340-1868


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